05 junio 2008

LATIONAMERICA FIRME EN LA REUNION DE LA FAO--

FOTO: EFE
En su intervención ante la cumbre, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó que los biocombustibles no son culpables de la actual crisis.

En su intervención ante la cumbre, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó que los biocombustibles no son culpables de la actual crisis.

Fuentes internas de la FAO concordaron en que la declaración final, que se preveía estaría en tres días de labores, está lejos de ser un texto definitivo.
AgenciasRoma
Los cientos de asistentes a la cumbre de la FAO trabajaban este jueves en una declaración final orientada a comprometerlos en luchar con todos los medios contra la emergencia alimentaria, pero sin tocar la temática de las subvenciones y los biocombustibles.
La posición de los países de América Latina obstaculiza la firma de una declaración final en la cumbre alimentaria que está a punto de concluir en la capital italiana.
Fuentes que están en la reunión manifestaron que un grupo de países latinoamericanos, encabezados por Brasil, no desean suscribir una declaración en la cual se culpe de la escasez alimentaria a los biocombustibles.
El documento final de la cumbre se cierra este jueves en Roma, pero hasta esta mañana era discutido en por los representantes de los países asistentes, según fuentes de la FAO. Su publicación estaba prevista para la tarde, antes de una rueda de prensa convocada para las 17: 00 locales (10:00 Ecuador).
Los párrafos de la declaración que presentan más problemas son los referidos a cuestiones relacionadas con la instrumentalización política de los alimentos y la liberalización del comercio agrícola, según dijeron fuentes cercanas a la negociación.
En concreto, una de las frases más problemáticas es la que señala que "los alimentos no deberían utilizarse como instrumento de presión política y económica", informaron las fuentes, que no identificaron los países que la rechazaban.
No obstante, precisaron que esa formulación "está en vías de solución", mientras algunas delegaciones han mostrado su extrañeza porque se ponga en duda tal expresión, ya usada en otros documentos de la ONU.
Por lo demás, la declaración reiterará compromisos y expresiones ya formuladas en anteriores reuniones, según el último borrador, como que "es inaceptable que 854 millones de personas sigan malnutridas en el mundo de hoy".
Con todo, las organizaciones gubernamentales consideran ya un fracaso la reunión, porque en su opinión refuerza el actual sistema económico que, a su juicio, ha llevado a la actual crisis de los alimentos. Fuentes internas de la FAO concordaron en que la declaración final, que se preveía estaría en tres días de labores, está lejos de ser un texto definitivo.

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