Artículo publicado el 28/06/2009 Ultima reactualización 28/06/2009 21:14 TULas Fuerzas Armadas de Honduras destituyeron y expulsaron este domingo hacia Costa Rica al presidente Manuel Zelaya, en cumplimiento de una orden de la Corte Suprema de Justicia, pero fue condenado en América y Europa. Zelaya denuncia un secuestro.
Las Fuerzas Armadas hondureñas acordonan el palacio presidencial en Tegucigalpa. Foto: Reuters
Lo que ha sido calificado claramente como un golpe de Estado por muchos y que generó condenas en todo el continente y en Europa, fue en "cumplimiento de una orden judicial (...) las Fuerzas Armadas, como defensoras del imperio de la Constitución han actuado en defensa del Estado de Derecho" dice un comunicado del poder judicial.
El derrocamiento de Zelaya se produjo el día en que el presidente convocaba a una consulta popular en la cual deseaba obtener la luz verde e instalar una cuarta urna en las elecciones generales del 29 de noviembre con el fin de establecer una Asamblea Constituyente que reforme la Constitución y permita la reelección presidencial. La iniciativa había sido declarada como “ilegal” por el Tribunal Supremo de Justicia, el Electoral, el Congreso y encontró la oposición de las Fuerzas Armadas
Poco después, los canales de televisión y radios fueron totalmente silenciados. Las retransmisiones del canal 8 de televisión, gubernamental, salieron del aire. Momentos antes, el presentador llamó a la población a que se concentrara en la plaza Libertad. Sus últimas palabras al aire fueron: "Parece que los militares vienen hacia aquí". A primeras horas de la mañana aviones militares y helicópteros surcaban el cielo de Tegucigalpa, que se ha quedado sin luz y prácticamente incomunicada.
El presidente de Honduras, Manuel Zelaya durante una rueda de prensa en Costa Rica. Foto: Reuters
El relato de la detención de Zelaya
"A mí me despertaron los balazos... cuando entraron (los soldados) me encañonaron y me empezaron a amenazar que me iban a disparar si no soltaba el celular que tenían en mi mano", relató Zelaya desde San José.
Luego "me subieron a un vehículo, me llevaron a la Fuerza Aérea y me subieron a un avión y me trajeron a Costa Rica", agregó el presidente hondureño, quien negó haber renunciado.
En Honduras se prepara la sucesión
Mientras tanto en Honduras, ocho de los ministros de Zelaya, entre ellos la canciller Patricia Rodas, fueron detenidos por las fuerzas militares, según confirmó un funcionario del gobierno a la AFP.
En Honduras se prepara la sucesión
Mientras tanto en Honduras, ocho de los ministros de Zelaya, entre ellos la canciller Patricia Rodas, fueron detenidos por las fuerzas militares, según confirmó un funcionario del gobierno a la AFP.
El Congreso Nacional se reunió el mismo domingo para elegir a un nuevo mandatario, que según la Constitución es el presidente del poder legislativo, Roberto Micheletti, ante la ausencia de un vicepresidente.
Según explicó el comisionado para los derechos humanos en Honduras, Ramón Custodio, en diálogo con RFI, no se trata de un golpe de estado.
En Tegucigalpa, la Casa Presidencial permanecía acordonada por decenas de soldados con tanquetas, pero hasta allí concurrían también centenares de seguidores del presidente depuesto que exigían su regreso. Los manifestantes quemaban llantas y coreaban consignas como "el pueblo unido, jamás será vencido".
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