Fotografía cedida por el diario "La Opinión" este 21 de noviembre de 2009, que muestra a tres miembros de la Guardia venezolana mientras instalan una carga explosiva el pasado jueves en un puente que cruza el río Táchira entre las fronterizas poblaciones de Ragonvalia (Colombia) y Las Delicias (Venezuela). El presidente colombiano, Álvaro Uribe, calificó el vienes de "muy grave" la voladura de este y otro puente en la frontera, pero insistió en mantener el tono conciliador hacia el país vecino al afirmar que su gobierno "no producirá gestos de guerra".
EFE
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Por GONZALO GUILLEN
El Nuevo Herald
Adam Isacson, director del programa para Colombia del Center for International Policy, de Washington, considera que la violencia actual en la frontera de Colombia con Venezuela ``va a empeorar'' y que ahora ```es mucho más probable'' que ambos países puedan trenzarse en una ``guerra limitada, como una batalla fronteriza que duraría varios días y que cobraría cientos de vidas''.
El Nuevo Herald
Adam Isacson, director del programa para Colombia del Center for International Policy, de Washington, considera que la violencia actual en la frontera de Colombia con Venezuela ``va a empeorar'' y que ahora ```es mucho más probable'' que ambos países puedan trenzarse en una ``guerra limitada, como una batalla fronteriza que duraría varios días y que cobraría cientos de vidas''.
¿Cómo ve usted el contexto en que se desarrolla el actual conflicto fronterizo entre los dos países en la zona fronteriza de Catatumbo, cerca de Cúcuta?
El Cacatumbo ha sido uno de los lugares más sangrientos de todos el país, pero también son así Arauca y la Serranía de Perijá. Esas son zonas altamente estratégicas por su cercanía con la frontera porque son rutas claves para el narcotráfico y porque allí hay petróleo y también hay tráfico de gasolina [desde Venezuela].
Esas son zonas desprotegidas
El poco estado que existe es bastante corrupto. Entonces, hay hartas razones para ver altos niveles de criminalidad y violencia.
¿Ha empeorado la violencia allí?
La violencia en la zona de frontera no es algo nuevo, pero en los últimos 10 años ha empeorado bastante sin que ninguno de los dos gobiernos pueda controlarla.
El Presidente Hugo Chávez amenazó con poner 15 mil soldados en la frontera: ¿qué consecuencias puede tener eso?
Yo veo bueno que Chávez envíe a 15 mil o más soldados a la frontera y me pegunto por qué no lo había hecho antes. Pero también me pregunto por qué la fuerza pública colombiana que ya tiene tanta presencia ahí no ha podido o no ha querido controlar la violencia que existe en zonas como Arauca, Catatumbo y serranía de Perijá que es uno de los lugares más violentos del país.
La violencia en Catatumbo vista desde Bogotá se creía más o menos controlada.
El Catatumbo fue tierra de Salvatore Mancuso y del Bloque Catatumbo que incineraron a sus víctimas en hornos. Y también las FARC y el ELN allá y en Arauca han librado una guerra bastante sangrienta desde, diría, el 2004 y el 2005 sin ningún esfuerzo notable del estado para controlarlo y claro que en Cúcuta especialmente la penetración de los paramilitares en la política ha sido casi completa. El fiscal de Cúcuta, el ex alcalde Ramiro Suárez, creo que el gobernador de Norte de Santander en algún momento han tenido enlaces fuertes con Mancuso [narcotraficante y jefe paramilitar extraditado a Estados Unidos] y con AUC [Autodefensas Unidas de Colombia] y con gran parte de la clase política de esa zona. Entonces, el descontrol de esa zona ha contribuido para llegar a la situación actual de tensión internacional, pero es una vieja historia.
¿Ve usted posibilidades de solución a la crisis actual?
Yo veo que la situación de violencia en la frontera va a empeorar. No veo cómo no. Porque el tráfico de cocaína por el territorio venezolano sigue en aumento y el nivel de descontrol y de delincuencia común en el lado venezolano sigue también en aumento y no hay casi ninguna esperanza de mejor colaboración entre las fuerzas de seguridad de ambos lados. No veo ningún esfuerzo por compartir inteligencia ni por hacer maniobras conjuntas. En cambio, veo una desconfianza creciente. Una creencia del lado colombiano de que en Venezuela de hecho están apoyando a las FARC.
Entonces, no hay solución inmediata a la vista
Y, bueno, con una actividad ilegal en aumento y una desconfianza total entre las fuerzas de seguridad no veo ningún escenario de mejoramiento. Creo que se va a endurecer más. Con la ofensiva del gobierno colombiano contra la guerrilla en el centro del país se ve un aumento de la presencia guerrillera en esa zona fronteriza y las FARC en zonas como Arauca y Vichada tienen un dominio muy fuerte. El frente 16 [de las FARC] sigue estando activo a pesar de que murió [su jefe]el `Negro Acacio' y sigue enviando grandes montos de cocaína.
Si los presidentes Chávez y Uribe detuvieran las actitudes hostiles de uno hacia el otro, ¿esta guerra silenciosa en la frontera se detendría?
No creo que la violencia de la que estamos hablando tenga que ver con las disputas políticas en las capitales. Al revés, los incidentes en la frontera pueden agravar esas disputas. No importa qué pasa en Bogotá o Caracas para los que en la frontera manejando los carteles, el tráfico de gasolina y todo eso. Esa violencia va a seguir recrudeciéndose mientras los líderes en las capitales lo aprovechan políticamente.
Esa violencia podría desencadenar un conflicto internacional, quizá por puro nerviosismo.
Creo que un escenario de guerra limitada, como una batalla fronteriza que duraría varios días y que cobraría cientos de vidas es mucho más posible que antes. No daría una probabilidad más allá de 25 por ciento. Una guerra total en que los ejércitos se enfrenten y haya bombardeos en las ciudades principales y que dure por semanas o meses no veo eso como escenario probable. Pero un pulso, una batalla para que un lado trate de mostrar su poderío militar sobre el otro, que acaba rápidamente, pero que tiene un alto costo en vidas, es más probable cada día.
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