Con la llegada a La Habana del presidente de Guatemala, Álvaro Colom, Un desfile de personalidades sin precedentes.
Se inició con el Presidente Martín Torrijos de Panamá, lo siguió su par de Ecuador, Rafael Correa y después llegaron las primeras mandatarias de Argentina y Chile, Cristina Fernández y Michelle Bachelet, quienes incluso se reunieron con Fidel Castro.
En esta oportunidad, el mandatario de Guatemala también tiene previsto entrevistarse con el ex presidente cubano. De hecho, trae para él la mayor condecoración que otorga su país, la Orden del Quetzal en el grado de Gran Collar, que será entregada en reconocimiento a la asistencia médica prestada por Cuba a Guatemala.
Las relaciones entre los dos países se estrecharon durante la última década a raíz de la asistencia cubana que mantiene permanentemente a cientos de galenos repartidos por toda Guatemala, además de haber construido 5 hospitales oftalmológicos.
Un ejército de médicos
La llamada "Diplomacia de las batas blancas" le ha abierto un gran espacio internacional a Cuba, se trata de miles de médicos repartidos por todo el mundo atendiendo pacientes en las zonas más pobres y marginadas de cada país.
La llamada "Diplomacia de las batas blancas" le ha abierto un gran espacio internacional a CubaEn el caso de Guatemala ya han pasado más de 3.000 médicos, se han ofrecido cerca de 21 millones de consultas, se salvo la vida a 246.000 personas y en una década se redujo el índice de mortalidad infantil a la mitad.
La llamada "Diplomacia de las batas blancas" le ha abierto un gran espacio internacional a Cuba, se trata de miles de médicos repartidos por todo el mundo atendiendo pacientes en las zonas más pobres y marginadas de cada país.
La llamada "Diplomacia de las batas blancas" le ha abierto un gran espacio internacional a CubaEn el caso de Guatemala ya han pasado más de 3.000 médicos, se han ofrecido cerca de 21 millones de consultas, se salvo la vida a 246.000 personas y en una década se redujo el índice de mortalidad infantil a la mitad.
A este ejército de médicos cubanos hay que sumarle los 300 guatemaltecos graduados de forma gratuita en la Escuela Latinoamericana de Medicina de La Habana, los cuales ya se están incorporando a trabajar en sus comunidades de origen.
Pero la sanidad no es el único sector de colaboración entre los dos países. También hay programas de promoción de cultivos, de incentivo del deporte, y este año se inicia un plan masivo de alfabetización con el sistema cubano "Yo si puedo".
Protesta empresarial
Es en reconocimiento a toda esta colaboración de la isla que él Presidente Álvaro Colom pretende condecorar a Fidel Castro con la Orden Quetzal, algo que ha despertado protestas en el sector empresarial guatemalteco.
No estamos de acuerdo con darle la Orden del Quetzal a ese tirano. Es un insulto a tanto guatemalteco que murió durante la guerra interna del país
Carlos Zúñiga, empresario guatemaltecoCarlos Zúñiga, representante del empresariado de esa nación centroamericana informó que los hombres de negocios no acompañarían al Presidente Colom en su viaje como muestra de protesta contra la condecoración al ex presidente Castro.
"No estamos de acuerdo con darle la Orden del Quetzal a ese tirano. Es un insulto a tanto guatemalteco que murió durante la guerra interna del país", señaló el empresario refiriéndose a la actividad guerrillera de los años 60, 70, 80 y 90.
El gobierno cubano es acusado de apoyar política y militarmente a los grupos armados que operaron en Guatemala con el fin de derrocar el gobierno y construir un Estado socialista similar al que funciona en Cuba desde 1959.
"Apoyo y respeto"
La visita de Álvaro Colom, sin embargo, no despertará más resquemores en Guatemala que lo que despertaron la de sus pares en sus respectivos países, donde fueron bombardeados por los sectores políticos de la derecha y en ocasiones hasta por sus aliados.
No obstante, el desfile no se detiene. Este año seguirá con otras visitas tan importantes como la del Presidente de México, Felipe Calderón, quien ya confirmó la invitación de su homologo cubano, General Raúl Castro.
Raúl Castro agradeció a sus pares del continente porque su presencia en la isla "es una muestra de apoyo y de respeto a Cuba", dijo y agregó que se trata de "un reconocimiento a la resistencia del país durante estos 50 años".
El análisis parece justo si se tiene en cuenta que todos los presidentes han criticado públicamente el embargo de Estados Unidos contra Cuba y ninguno de ellos se reunió con los opositores a pesar de los repetidos llamados que éstos hicieron.
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