El mandatario electo, quien asumirá el cargo el 20 de enero, dijo que espera del nuevo Congreso una aprobación pronta de la legislación con las medidas de rescate05 de enero 2009 06:22 pm - AP
Barack Obama, ofrece llevar cambios a la Casa Blanca AP
El presidente electo Barack Obama señaló el lunes que la economía estadounidense estaba "mal y poniéndose peor" al comenzar conversaciones con líderes del Congreso sobre un enorme programa de emergencia para enfrentar la crisis.
Obama pronosticó que los legisladores aprobarían un plan de recuperación económica con cientos de miles de millones de dólares en gasto nuevo y reducción de impuestos en un plazo de dos semanas luego de que tome el cargo.
"La economía está muy enferma", señaló Obama antes de reunirse con el líder demócrata del Senado, Harry Reid. "La situación está empeorando. ... Debemos actuar y actuar ahora para romper el impulso de esta recesión", agregó.
El mandatario electo, quien asumirá el cargo el 20 de enero, dijo que espera del nuevo Congreso una aprobación pronta de la legislación con las medidas de rescate.
"Espero poder firmar un proyecto de ley poco después de ocupar el cargo", apuntó. Al presionársele sobre cuándo sería, respondió: "para finales de enero o el primero de febrero".
La propuesta de Obama para estimular la economía incluye recortes fiscales hasta por 300.000 millones de dólares, incluida una disminución fiscal de 500 dólares para la mayoría de los trabajadores y de 1.000 dólares a parejas, así como más de 100,000 millones de dólares a negocios, dijo un funcionario de su equipo de transición
El valor total de los recortes fiscales sería significativamente más alto del que se había mencionado antes.
El gasto federal nuevo, el cual también buscará reanimar a la economía, podría elevar el paquete total a un rango de 800.000 millones de dólares aproximadamente.
Obama se reunió poco antes con la presidenta de la cámara baja, Nancy Pelosi, también demócrata, mientras establecía un tono de urgencia para manejar una situación financiera que describió como "precaria".
"La razón por la que estamos hoy aquí es porque los negocios de la gente no pueden esperar", dijo Obama al llegar al Capitolio para hablar con Pelosi.
"La presidenta (Pelosi) y su personal han sido extraordinariamente útiles al trabajar con nuestro equipo para que podamos modelar un plan de recuperación económica y comenzar a enviar a la gente nuevamente a trabajar", señaló.
Los descuentos de impuestos a individuos y parejas serían similares a los cheques de reembolso enviados el año pasado por el gobierno del presidente saliente George W. Bush y el Congreso en un intento por reactivar la economía en desaceleración.
Una diferencia determinante es que los descuentos podrían ser hechos ahora, descontando menos dinero del salario de los trabajadores. Ello costaría entre 140.000 y 150.000 millones de dólares durante los siguientes dos años.
El plan permitiría a las empresas que tuvieron pérdidas durante el año pasado recibir un crédito fiscal frente a las ganancias obtenidas durante los cinco años previos, en lugar de los dos años permitidos actualmente.
Otro plan presentado por el equipo de Obama concedería un programa de descuentos por un año, con un monto de entre 40.000 y 50.000 millones de dólares, para las empresas que contraten a trabajadores nuevos, dando además incentivos a las que inviertan en equipos nuevos.
"Enfrentamos un extraordinario reto económico. Estamos esperando un deprimente informe sobre los empleos el fin de semana", dijo Obama.
Pelosi señaló que "mañana juramentaremos a un Congreso nuevo y empezaremos con buen pie a trabajar sobre las iniciativas ... para aliviar el dolor que siente el pueblo estadounidense".
Antes de reunirse con Reid, Obama señaló que "en este caso, éste no es un problema republicano ni un problema demócrata. Es un problema estadounidense y todos vamos a tener que trabajar juntos y hacer lo que espera el pueblo estadounidense".
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