Insta a los iraníes un proyecto para examinar los beneficios de perder su estatuto de paria en el oeste. Foto: Vahid Salemi / AP.-Jueves 29 de enero 2009
Los funcionarios de la administración de Barack Obama han redactado una carta a Irán del presidente destinado a descongelar las relaciones Irán-Estados Unidos y abrir el camino para que cara a cara, conversaciones, "El Guardian" se ha enterado.
Departamento de Estado de los EE.UU. ha estado trabajando en los borradores de la carta ya que Obama fue elegido el 4 de noviembre del año pasado. Es en respuesta a una larga carta de felicitaciones enviada por el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, el 6 de noviembre. Julian Borger en plan de EE.UU. para enviar carta amistosa a Irán diplomáticos dice la carta de Obama sería un gesto simbólico para marcar un cambio en el tono de la actitud hostil adoptada por la administración Bush, que retrató a Irán como parte de un "eje del mal ". Sería la intención de disipar las sospechas de los líderes de Irán y allanar el camino a Obama a participar directamente, una ruptura con la política.
Funcionarios del Departamento de Estado han compuesto al menos tres borradores de la carta, lo que da garantías de que Washington no quiere derrocar al régimen islámico, sino que simplemente busca un cambio en su comportamiento. La carta sería dirigida al pueblo iraní y enviado directamente al Líder Supremo de Irán, el Ayatola Ali Khamenei, en libertad o como una carta abierta.
Un proyecto de propuesta sugiere que Irán debe comparar su relativamente bajo nivel de vida con la de algunos de sus vecinos más prósperos, y contemplar los beneficios de perder su estatuto de paria en el oeste. Aunque el tono es conciliador, también se insta a Irán a poner fin a lo que los EE.UU. pide patrocinio estatal del terrorismo.
La carta está siendo considerado por el nuevo secretario de estado, Hillary Clinton, como parte de una profunda revisión de la política de EE.UU. contra Irán. La decisión sobre el envío no se espera hasta que el examen se ha completado. En una entrevista el lunes con la televisión Al-Arabiya red, Obama indicó en un enfoque más amigable hacia la República Islámica.
Ahmadinejad dijo ayer que estaba esperando pacientemente para ver lo que la administración Obama elaborar. "Vamos a escuchar las declaraciones de cerca, vamos a estudiar cuidadosamente sus acciones, y, si hay cambios reales, que nos dará la bienvenida", dijo. Ahmadinejad, quien confirmó que las elecciones de nuevo en junio, dice que no está claro si la administración Obama sólo tenía la intención de un cambio en las tácticas o estaba buscando un cambio fundamental.
Hizo un llamamiento a Washington para pedir disculpas por sus acciones contra Irán en los últimos 60 años, incluidos los EE.UU. el apoyo a un golpe de estado de 1953 que derrocó al gobierno elegido democráticamente, y los EE.UU. derribo de un avión de pasajeros iraní en 1988.
El Departamento de Estado se negó a comentar ayer sobre el proyecto de las letras. Preocupación de EE.UU. sobre Irán, principalmente se centra en su programa de enriquecimiento de uranio, Washington alega que se destina a dotar al país de una capacidad de armas nucleares. Irán alega que el programa es para fines civiles. El diplomático se mueve, dada la mayor urgencia por el temor de que Israel podría tomar medidas unilaterales para bombardear las instalaciones nucleares iraníes.
La magnitud del problema que enfrenta el nuevo presidente americano se vio reforzada ayer, cuando un alto asesor de Ahmadinejad, Aliakbar Javanfekr, dice que, a pesar de los llamamientos de los EE.UU., el Irán no tenía intención de detener sus actividades nucleares. Cuando se le preguntó acerca de una resolución de la ONU pide la suspensión de enriquecimiento de uranio de Irán, Javanfekr, el asesor presidencial para asuntos de prensa, respondió: "Estamos pasado esa etapa." Una de las principales preocupaciones gira en torno a Irán sospecha de que los EE.UU. se dedica a la acción encaminada a convertir el cambio de régimen, incluido el apoyo a grupos separatistas en áreas tales como Curdistán, Sistán-Baluchistán y Khuzestán.
El Departamento de Estado ha negado en repetidas ocasiones que no hay ningún apoyo norteamericano para esos grupos. Morir en su día, la administración Bush estaba planeando abrir una Sección de Intereses de EE.UU. en la capital iraní Teherán, un paso por debajo de una embajada. Bush, el secretario de Estado, Condoleezza Rice, dijo que nunca sucedió, porque la atención se desvió por la invasión rusa de Georgia. Otros dicen que rightwingers en el gobierno de Bush organizó una acción de retaguardia para bloquearla. La idea ha resurgido, pero si hay conversaciones directas con Irán, se podrá decidir que una presencia diplomática eliminaría la necesidad de una misión diplomática allí, al menos en el corto plazo.
Si bien Obama está tomando la iniciativa en la política hacia Irán, la administración antes anunciar que Dennis Ross se convertirá en un enviado especial para el país, tras los nombramientos de la semana pasada George Mitchell, el veterano mediador EE.UU., como enviado especial al Oriente Medio, y Richard Holbrooke, quien ayudó a gestionar el acuerdo de paz de Bosnia, como enviado especial a Pakistán y Afganistán. Ross, que tuvo un papel principal en el Oriente Medio, las conversaciones de paz en la administración de Bill Clinton, será responsable en el día a día para la aplicación de la política hacia Irán. En un gráfico iraní signo de la desconfianza, el diario Kayhan dura, que se considera próximo al ayatolá Alí Jamenei, Ross ha denunciado como un "grupo de presión sionista".
Saeed Leylaz, un analista basado en Teherán, dijo una carta de EE.UU. tendría que ir acompañada de garantías de seguridad y un acuerdo para la reducción de las sanciones económicas. "Si se envía una carta que será un paso muy importante hacia una mejor relación, pero deben tener cuidado de no pensar en Teherán responderá inmediatamente", dijo. "Habrá conflictos en el interior del sistema sobre esa carta. Hay muchos radicales que no quieren ver las relaciones ordinarias entre Teherán y Washington. Para convencer al Irán, deben enviar un mensaje muy claro que no van a intentar para destruir el régimen. "
Fuente: El Guardian
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