20 octubre 2010

SARKOZY ORDENA DESBLOQUEAR TODOS LOS DEPÓSITOS DE COMBUSTIBLE....

Una mujer porta una pancarta contra el capitalismo y el estado en la manifestación en París contra la reforma de las pensiones.- AFP
Un grupo de personas disfrazadas participan en la manifestación contra la reforma de las pensiones.- AFP

La protesta social en Francia

Hoy continuaban los paros en algunos sectores estratégicos, como las refinerías o los transportes

EL PAÍS / AGENCIAS - Madrid / París - 20/10/2010
El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, ha ordenado que se desbloqueen todos los depósitos de combustible del país "a fin de restablecer lo antes posible una situación normal" en el país, afectado por las huelgas y protestas contra la reforma del sistema de pensiones, según ha informado el Elíseo hoy en un comunicado. "Llevaré a término la reforma de las pensiones porque mi deber como jefe de Estado es garantizar a los franceses que ellos y sus hijos podrán contar con una jubilación y que el nivel de las pensiones se mantendrá", afirma Sarkozy en la nota.
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El mandatario francés, que ha reconocido que es "una reforma difícil", ha subrayado que tanto él como su Gobierno se han mostrado "atentos a todas las propuestas, principalmente las de los agentes sociales". Asimismo, Sarkozy ha hecho hincapié en que, aunque "es normal que en una democracia cada uno pueda expresar su inquietud o su oposición", "hay ciertos límites que no deben franquearse y mi deber es garantizar el respeto del orden republicano al servicio de todos los franceses".
"Para millones de nuestros conciudadanos, los transportes constituyen una cuestión vital", así pues, esto constituye una "libertad fundamental", ha señalado el presidente francés. Sin embargo, "estos últimos días muchos franceses han visto su vida cotidiana perturbada por problemas de aprovisionamiento que han afectado a una parte de las estaciones de servicio", ha lamentado.
El presidente francés ya adelantó ayer que pasaría al ataque. Con medio país buscando combustible (sobre todo diésel) de gasolinera en gasolinera, los estudiantes revueltos, los trenes funcionando a la mitad y los sindicatos convencidos de que disputan el último asalto para que el Gobierno retire su proyecto de ley de reforma de las pensiones, Sarkozy anunció que arbitraría medidas para solucionar la escasez de gasolina y evitar los bloqueos de depósitos de carburante. Lo dijo en Deauville (Normandía) junto al presidente ruso, Dmitri Medvédev, y la canciller alemana, Angela Merkel, durante una mini cumbre internacional y muy ensombrecida por el clima de agitación e incertidumbre que vive el país, con 4.500 gasolineras esperando un camión de aprovisionamiento.
Tras la jornada de huelgas y manifestaciones de ayer, hoy continuaban los paros en algunos sectores estratégicos, como las refinerías o los transportes (con afectación en trenes y vuelos) y se organizaron acciones de bloqueo de diferentes infraestructuras. Así, por ejemplo, esta mañana cientos de manifestantes cerraron durante varias horas los accesos a los aeropuertos de Toulouse y Nantes.
La sexta jornada de protesta desde septiembre, registrada ayer, estuvo marcada por la radicalización de los estudiantes, con un alumno herido en París, y los enfrentamientos con la policía en Nanterre, París y Lyon. Según la policía, respondieron a la llamada de los ocho sindicatos principales en Francia 1,1 millones de franceses, algo menos que en el martes 12. Según los sindicatos, fueron 3,5 millones de personas, las mismas que hace una semana. Más allá del baile de cifras, en cualquier caso, el movimiento de protesta no se desinfla. Aunque tampoco crece.
La huelga indefinida, la falta de gasolina y la incertidumbre generalizada afectan ya a la vida económica. La patronal francesa se muestra muy "inquieta" por los bloqueos de depósitos de combustible. La presidenta de la asociación de empresarios franceses, Laurence Parisot, señaló ayer que si la situación no se calma, algunas pequeñas empresas podrían entrar en una deriva "catastrófica".
El sector más afectado es el de la construcción y el de las obras públicas. Un comunicado emitido ayer por un portavoz de este sector recordaba que las empresas que construyen carreteras han sido las primeras afectadas por la paralización de las refinerías debido a que el asfalto procede de ahí: "Para otras empresas de construcción, la falta de gasoil impide a los camiones acarrear los materiales necesarios". Y añade que pueden verse obligadas "a tomar medidas como despidos técnicos".

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